Os presentamos esta nueva creación de Spaicuines, en la que hemos colaborado con la arquitecta Aida Fernández, quien diseñó la rehabilitación de esta vivienda.
Las cocinas en blanco y madera representan un equilibrio perfecto: la frescura del blanco se combina con la calidez de las vetas de la madera, creando un espacio acogedor y atemporal. Aunque las tendencias cambian, esta combinación nunca pasa de moda y se adapta perfectamente a cocinas abiertas, sin condicionar la decoración del resto del hogar.
El blanco en los armarios, junto con los detalles del breakfast, el mueble decorativo y los armarios de la isla que dan a la sala en madera, reflejan un estilo mediterráneo y costero, lleno de luz y sencillez. Además, el color blanco en las zonas de trabajo aporta higiene y comodidad, haciendo que cocinar sea una experiencia agradable.
En esta reforma, hemos optado por prescindir de muebles altos para dar protagonismo a la ventana de una sola hoja, que ofrece una vista amplia y luminosa, como si fuera un cuadro. También hemos incluido un práctico y cómodo breakfast, ideal para desayunos y cafés, situado fuera de la zona de trabajo y con su propia iluminación, para mayor funcionalidad.
Para el material de la encimera, elegimos un Dekton en tonos neutros, que aporta armonía y elegancia a toda la composición.
Ha sido un verdadero placer trabajar con Aida Fernández y su cliente en este proyecto. Esperamos que estas imágenes os inspiren y os ayuden a imaginar cómo puede transformar una cocina en un espacio cálido, actual y lleno de estilo.
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